Es de público conocimiento que con la llegada de Juan Domingo Perón al poder nacional se reivindicó el movimiento obrero como nunca antes había ocurrido. Y esto quedó reflejado en cada 1º de mayo bajo la presidencia de Perón.
PRIMERO DE MAYO PERONISTA
Durante su primera gestión (1946-1952) la conmemoración del día del trabajador alcanzaría una notable importancia poco antes vista, con plazas colmadas en todo el país que demostraban el valor que tenía el trabajador para el gobierno.
A raíz de las numerosas reivindicaciones obreras logradas por el peronismo, el 1º de mayo se convirtió en un día emblemático; entre las diversas manifestaciones de la época se destaca la convocatoria de los obreros en Plaza de Mayo, asistiendo en gran número para escuchar la voz de Perón.
“Llevo en mis oídos la más maravillosa música que, para mí, es la palabra del pueblo argentino”. Esta famosa frase fue una de las últimas del General, y que sintetiza claramente su pensamiento acerca de una de las columnas del peronismo: el pueblo.
A través de una lucha incansable, Perón logró dignificar y jerarquizar la posición del trabajador defendiéndolos ante la oligarquía.
REINAS DEL TRABAJO
Previo al gobierno peronista, hubo aislados intentos de mejorar la posición del obrero pero no fueron eficaces hasta que en 1946 se comenzó a respetar los derechos del trabajador.
Desde el gobierno, y a través de una política social se buscó la felicidad del individuo y de la comunidad y se logró de una manera destacable. Incluso, bajo el mandato de Perón, la celebración de la reina del trabajo formaba parte del ritual obrero del 1º de Mayo.
Edma Constantini, quien fuera una de las ocho reinas elegidas durante el primer mandato peronista, sostuvo que “no era una competencia de belleza, era más para homenajear a la persona trabajadora”.
La celebración del día del trabajador, culminaba con la coronación de la reina. La elegida era coronada por Evita mientras vivió, pero tras su muerte, el ritual continuó con Perón.
Las reinas del trabajo significaban la imagen del trabajo digno, lejos de la humillación que habían sufrido años anteriores. La elección se hacía entre todas las trabajadoras afiliadas a las distintas organizaciones obreras.
Sin lugar a dudas, el Justicialismo siempre estuvo ligado al trabajador, dignificándolo y jerarquizando su labor.
Investigación realizada por Joel Gentil,
Juventud Peronista de Ensenada
