En los primeros años de su primera y segunda presidencias, Juan Domingo Perón, permitió la consolidación de un modelo basado en la nacionalización de los yacimientos y el monopolio estatal concentrado en YPF.
Su expresión máxima fue la inclusión en el artículo 40 de la Constitución reformada en 1949 de la “propiedad inalienable e imprescriptible de la Nación” de los yacimientos de petróleo, carbón, gas y demás fuentes naturales de energía. |