A la par de su desarrollo económico, las megamineras que operan en el país ven crecer también las protestas en su contra. Los últimos dos episodios dan cuenta de que no hay licencia social para estos negocios millonarios.
A principios de febrero, a cinco meses de haber firmado un convenio con el gobierno de La Rioja para buscar oro en el cerro Famatina, la compañía minera Osisko anunció que si no hay licencia social para desarrollar el proyecto, la subsidiaria Minera El Portal no realizará ninguna tarea en la zona. La firma se vio obligada a detener el proyecto tras las fuertes protestas en contra de la explotación, al tiempo que, dijo, implementará una campaña de información a la población sobre la actividad.
Una semana más tarde, manifestantes que participaban de una protesta en contra de la minería en Belén, Catamarca, denunciaron que las fuerzas de seguridad detuvieron a, al menos 15 personas en esa provincia, entre ellos un menor, luego de que se resistieran a acatar la orden de desalojar la ruta 40, que mantenían bloqueada desde hace 15 días y que desemboca en el yacimiento Bajo La Alumbrera , un megaproyecto a cielo abierto.