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sábado, 29 de noviembre de 2008

DOS ROSTROS PARA UNA MISMA EVITA

¿Cómo ser Intendente en los tiempos del doble discurso?
En Ensenada nos ofrecen una clase práctica

nueva-ensenada@hotmail.com.- Ambigua y ambivalente, tal parece la visión que tiene el lord mayor ensenadense frente a una figura polémica si las hay, como es la de Eva Duarte de Perón.
Don Secco, cuando se muestra rodeado de militantes peronistas de larga trayectoria, como los concejales Víctor Vázquez o Hugo Zocco, inaugurando un busto de la popular Evita en el Complejo homónimo de Punta Lara profiere discursos riquísimos en parrafadas ensalzadoras de su figura. Sin embargo, desde la intimidad de su oficina, lejos de la obligación de mostrarse “políticamente correcto”, pareciera no conservar tan ferviente admiración y respeto.
Para muestra basta un botón: El lector podrá observar, ilustrando ésta opinión, fotografías de los bustos de Eva y de Perón. Son los tradicionales de la Plaza Belgrano; los mismos que alguna vez intentaron ser removidos en función de la estética plazuna. La representación de la Primera Dama, (¿quizás para el solaz interno del Intendente?) fue “adornada” con burdos bigotazos y sonrisa desproporcionada.
A su lado, el tres veces electo presidente de la Nación por voto popular, “luce” un bigotillo de indudable corte hitleriano... En este punto la posibilidad de una travesura escolar se desvanece… ¿Qué niño de 8 o 10 años puede saber que los sirvientes criollos del gobierno de José Stalin, en la ex - Unión Soviética, acusaban a Perón y al Movimiento Nacional Justicialista de “Nazi- Peronistas”; además de ser simpatizantes de los gobernantes en las Naciones del Eje durante la Segunda Guerra Mundial?
Estos monumentos son vistos todos los días por funcionarios y concejales cuando ingresan al Palacio Municipal y doblemente vistos por el Intendente: Al ingresar al edificio de La Merced y Don Bosco y desde la ventana de su oficina. Sin embargo, nadie hasta ahora se ha dignado a limpiar las representaciones de dos personas fundamentales de nuestra Historia contemporánea.

¿QUÉ VES CUANDO ME VES?

¿Cuál es el rostro real de Don Secco? ¿El que muestra al mirar hacia La Merced y Don Bosco o el que aparenta cuando pronuncia frases tales como: “pasarán los años y los gobiernos pero nadie podrá dejar de reivindicar la figura de Evita"? Hay mucha gente de este país que con sus hechos políticos le cambió la vida, el destino y hoy son grandes personas. Ojalá que este ejemplo lo sigamos teniendo de por vida cada uno de los que estamos acá” (Discurso acto del 8 de octubre en Camping Municipal de Punta Lara).
Muchos ilusos, como el que esto escribe, creímos que tras el Argentinazo del diciembre del 2001 la clase política sabría leer el mensaje que les mandaba la asonada popular. Suponíamos que se dejarían de lado las prácticas clientelistas, las promesas incumplidas, los dobles discursos. Poco a poco la ilusión deja paso al realismo y, según pasan los días, vemos desfilar por los medios de comunicación personajes tras personajes políticos que nos demuestran que el “vale todo”, el “hacé la tuya” y el “si digo la verdad no me votan”, en fin, el relativismo ético noventista sigue vigente y saludable.
Así andan la Biblia y el Calefón revueltos en los discursos de revolucionarios de peluche cargados de petróleo. En estas peroratas podemos constatar que un guerrillero foquista y voluntarista como el Che Guevara es comparado con Eva Perón, candidata a Vicepresidente por una organización colectiva y obrera como la CGT; un profeta de la Paz y el Amor al Prójimo como Jesús con el descubridor de las Contradicciones Sociales y la Lucha de Clase como Carlos Marx. (“Dále que va, todo es igual…”)
No nos duele esta actitud de los expertos y eternos oportunistas de la política, capaces de reciclarse frente a un golpe de Estado o cualquier cambio de signo en un régimen democrático, con tal de caer parados frente al nuevo orden de cosas. Pero si nos desilusiona esta actitud de gente que vimos pelear en diversos frentes para cambiar el descaro y la impunidad de los ‘90. Sería bueno que esta gente, tan afecta a compararse con los revolucionarios independentistas latinoamericanos del siglo XIX, relean primero sus discursos y biografías. San Martín y Bolívar, por ejemplo, eran lacónicos y cuando debían hablar o escribir siempre cultivaron un lenguaje preciso, carente de adjetivaciones, casi adusto. Es que su interés no era ofrecer un “chow” mediático sino liberar a su Pueblo y crear una Nación.
Puede parecer una pequeña diferencia, una nimiedad, un detalle…pero dicen que en los detalles uno encuentra a Dios.
La actuación de Eva Duarte en el escenario político argentino puede ser cuestionada o reivindicada; su recuerdo puede ser amado u odiado. No importa cual fuere el sentimiento del ciudadano: Siempre que sea sincero será respetable. PERO NO SE PUEDEN SOSTENER AMBAS OPINIONES AL MISMO TIEMPO SIN MENTIR.
Prefiero indicar por ahora, que en este caso se está pecando de omisión… AUNQUE SI SE PERSISTE, LA INACCION DEVENDRÀ EN COMPLICIDAD

Raúl Corzo
Dni 12 314 313